Amboise, una villa francesa con aire italiano

Belén Valdehita
Belén Valdehita 14 Mayo, 2019

Situada en pleno Valle del Loira, la ciudad francesa de Amboise destaca por su gran castillo, su sugerente encanto medieval y por sus afamados viñedos y bodegas.

Castillo de Amboise, en Francia
Владимир Шеляпин

Siempre es un auténtico placer recorrer el Valle del Loira, y lo es más hacer una detenida parada en la impresionante ciudad de Amboise. Ubicada en la Ruta de los Castillos del Loira, no sólo cuenta con una magnífica fortaleza, también dispone de una buena muestra de edificios históricos, algunos de ellos dotados de un marcado estilo renacentista italiano.

Gran parte de la influencia italiana que posee esta villa francesa se debe a que en ella pasó sus últimos años de vida el famosísimo artista italiano Leonardo da Vinci, que además está enterrado en la capilla del castillo.

Ubicado junto al río Loira, esta ciudad gala está rodeada de grandes viñedos, y alberga excelentes bodegas que se pueden visitar, y donde podremos probar los magníficos vinos locales. Es también un buen lugar para degustar la maravillosa cocina francesa.

Palacete de Clos Lucé, en Amboise, Francia
HiSoUR

Paseo monumental por Amboise

Es casi obligado comenzar el recorrido por Amboise visitando su espectacular castillo del siglo XIII. Lo encontraremos emplazado en la zona más alta de la ciudad, disfrutando de unas magníficas vistas panorámicas. Tuvo su mejor momento durante el reinado de Francisco I. Fue este monarca el que invitó a Leonardo da Vinci a vivir durante un tiempo en la villa, y allí, bajo el mecenazgo del rey, el genial artista italiano siguió trabajando hasta el mismo día su muerte, el 2 de mayo de 1519.

Proseguimos el recorrido con la visita al Palacete de Clos Lucé, que fue un generoso obsequio que el rey Carlos VIII hizo a su esposa, Margarita de Austria. En este mismo edificio se alojó da Vinci durante su estancia en Amboise. En el casco histórico, esta villa francesa mantiene muy bien conservadas sus callejuelas medievales, donde predomina la tradicional arquitectura de casas con fachadas entramadas con madera.

Una visita muy original es la de la Pagode de Chanteloup, una pagoda china de 44 metros de altura y siete pisos que se halla a las afueras de la ciudad. Fue construida en 1775 por orden del Duque de Choiseul. Y antes de abandonar Amboise, conviene acercarse al antiguo Hôtel Joyeuse, que alberga el Musée de la Poste, y ver la Fuente de la Tortuga de Max Ernst, que está situada junto al río.

Casco antiguo de Amboise
FotoNostra

Homenaje gastronómico en Amboise

Es bien sabido que la gastronomía en Francia es todo un arte, y Amboise es un buen ejemplo de ello. Son muchos los restaurantes y los encantadores bistrós donde podremos degustar la cocina francesa, además de tener la oportunidad de probar los estupendos vinos y quesos de esta tierra.

El Valle del Loira está lleno de viñedos, representando, por extensión y producción, la tercera región vitivinícola de Francia, después de Burdeos y Borgoña. Los vinos que aquí se elaboran son blancos secos, tintos jóvenes, rosados o de aguja, entre otras posibilidades.

Entre los restaurantes más recomendables y con mayor encanto se encuentran Le Patio, en el número 14 de la Rue Nationale; la Brasserie Hippeau, en el número 1 de la Rue François; Le Lion d'Or, en el 17 de Quai Charles Guinot; el restaurante Le 36, en el 36 de Quai Charles Guinot, o el Domaine de l'Arbrelle, en el 523 de la Rue de la Berthellerie.